Es bien sabido que una alta dureza en el agua provoca ciertos daños o perjuicio en nuestro cabello, pero… ¿Qué es la dureza del agua? ¿Cuáles son los daños que provoca? ¿Cómo puedo solucionarlo? Seguro que te lo has preguntado en más de una ocasión y si no fue así, no te preocupes, igualmente aquí daremos respuestas a estas preguntas.
Generalmente, cuando compramos un electrodoméstico como el lavavajillas nos pide que midamos la dureza y la clasifiquemos como agua:
Cada uno de ellos representa a un valor cuantitativo que indica la concentración de sales de magnesio y calcio, siendo el agua muy blanda la que posee menos concentraciones y viceversa.
Los champús, poseen la capacidad de precipitar las sales de magnesio y calcio, por lo que a mayor dureza del agua, menor eficacia y mayor gasto de champú tendremos e incluso nos dejará residuos en el pelo y cuero cabelludo. Inevitablemente, todo esto nos lleva a un deterioro en el cabello, menos brillo y un pelo más reseco, y por si esto fuera poco, también causa sequedad y picores en el cuero cabelludo.
La solución ideal sería un descalcificador de resina, en su defecto, un descalcificador de silicofosfato o polifosfatos, y como es evidente que en casa no disponemos de estos aparatos, usaremos de manera asidua, mascarillas, acondicionadores, cremas, serum y/o protectores capilares.